El presidente de Front Consulting, Luis Kiser, estimó que el número de nuevas empresas peruanas que franquician su concepto crecería 30% al cierre del año con el ingreso de nuevos jugadores.
“Las empresas peruanas invierten hasta 20 mil dólares para convertirse en una franquicia, como una manera de crecer y expandir sus negocios”, manifestó Kiser.
Los principales sectores que vienen creciendo más son los de gastronomía, belleza, salud, educación y entretenimiento, entre estos sobresalen los formatos de peluquerías, tiendas de artesanías, joyería, institutos, educativos, de idiomas, tiendas de ropa y otros.
Además, sostuvo que las franquicias peruanas ya operan en 16 países, entre ellos Chile, El Salvador, España, México, Argentina, EE.UU., Brasil y la India.
Para convertirse en una franquicia el negocio de la empresa interesada debe ser atractivo, además debe tener valores diferenciadores de otros negocios, tiene que ser rentable, tiene que contar con una marca medianamente conocida y registrada para ofrecer la seguridad jurídica correspondiente, apuntó.
“Las empresas se convierten en franquicias sobre todo pensando en expandirse en el exterior, y cualquier comprador extranjero, así sea de China, les va a exigir que sean reconocidas como franquicias”, indicó.
“Perú vive una efervescencia del mercado de franquicias, principalmente en el aspecto gastronómico al aprovechar el efecto paraguas de la marca Perú en la comida”, subrayó.