Moody’s Investors Services redujo las expectativas de crecimiento del Perú para este año. Según informó EFE, la agencia calificadora de riesgo internacional proyectó este viernes que la economía peruana avanzaría 2,3% en 2023, cuando anteriormente estimaba que crecería 3%. Sin embargo, sostuvo que aún es pronto para determinar el efecto final del conflicto sociopolítico que estalló en el país desde diciembre de 2022.
“Todavía es pronto para determinar el efecto final de las protestas, en vista que se trata de un evento que sigue en curso. No obstante, enero claramente será negativo de cara al crecimiento del PIB”, señaló Moody’s.
Moody’s indicó en su último reporte sobre los impactos de la crisis social en el Perú que los efectos económicos variarán según los sectores y la ubicación geográfica, dado que la zona sur del país ha sido el epicentro de las protestas y “la que viene exhibiendo una importante desaceleración debido a los bloqueos de carreteras y la destrucción de bienes tanto públicos como privados”.
Por otro lado, puntualizó que aunque la expectativa de crecimiento de la economía peruana es menor y “con potencial sesgo a la baja”, todavía se está por encima de la proyección para otros países de Latinoamérica como Colombia (1,5%), México (2%) y Brasil (0,7%).
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No obstante, recordemos que Moody’s Analytics, empresa encargada de análisis macroeconómico y distinta a la calificadora de riesgo, indicó que el PBI crecería solo 1,9% este año, con un crecimiento de 0,4% del consumo privado y una contracción de 1,5% en cuanto a la inversión fija.
Inestabilidad política impacta a la economía peruana
En cuanto al 2022, Moody’s aseguró que el crecimiento de 2,7% estuvo por debajo de las expectativas, en parte por la crisis sociopolítica que atravesó el Perú el año pasado y por los rezagos de la pandemia.
Por otra parte, la clasificadora de riesgos subrayó que las protestas están mermando los índices de expectativas empresariales en lo que va de 2023. Asimismo, señaló que un potencial escenario de cambio electoral “podría debilitar aún más las expectativas producto de la incertidumbre que se generaría sobre el futuro de la economía”.
Sectores económicos afectados por la crisis
La producción minera, que representa el 10% del PBI, está siendo impactada por el cierre temporal de la mina de estaño San Rafael, situada en la región de Puno, colindante con Bolivia.
Asimismo, hay menor producción de cobre de las minas Las Bambas, Antapaccay y Constancia debido a los bloqueos en el Corredor Minero del Sur. Esto pone en riesgo al menos el 30% de la producción de cobre del país. El sector “podría estar dejando de invertir alrededor de US$ 2.000 millones que se tenían asignados para 2023”.
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Finalmente, la calificadora de riesgos puntualizó que el sector construcción se verá afectado con una contracción preliminar del 3%. Además, el sector turismo sería uno de los más afectados, con pérdidas que estarían por encima de los S/ 1.700 millones.