En el segmento bancario Ripley ha continuado fortaleciendo su estrategia omnicanal, y hoy el 80% de sus clientes bancarios son digitales.
En Chile, la preferencia por su cuenta vista continúa con un fuerte aumento, cerrando el año 2020 con un monto de $95.742 millones y cuadruplicando el saldo registrado el año anterior.
Asimismo, la colocación digital representa el 46% de total de colocaciones del periodo.
A nivel consolidado, los pagos digitales en el Banco Ripley aumentaron en 65% respecto al 4T19, gestión que fue clave en los meses en los que las tiendas y sucursales bancarias se encontraron cerradas a causa de las restricciones y fases impuestas por la autoridad en ambos países.
De forma especial destaca el desempeño de Chek, su billetera digital, que supera los 650 mil usuarios enrolados y más de 25 mil comercios adheridos.
Por otro lado, y como resultado de la mejor gestión y digitalización de clientes y productos, la cobranza aumentó de forma importante, lo que contribuyó a una mejora en la cartera al día y un menor costo por riesgo neto en Chile, impulsado por los retiros de fondos de pensiones.
En tanto, la cartera bruta de colocaciones consolidada al cierre del 4T20 alcanzó los $993.134 millones, contrayéndose un 25,9% con respecto al mismo período del año anterior debido a políticas de originación más conservadoras en ambos países y una menor demanda de créditos asociada al menor dinamismo de las economías y las medidas de liquidez implementadas por las autoridades.
Si bien la cartera bruta del Banco Ripley se redujo producto de los mayores pagos y castigos observados en el período, existe una recuperación sostenida en el flujo de colocaciones respecto de los niveles mostrados en meses anteriores, gracias a la apertura de sucursales y mayor uso de los canales digitales.
Por su parte, los ingresos totales del negocio bancario de Ripley cayeron un 35,4%, asociado a la menor cartera y tasa de devengo como consecuencia de la caída de las tasas de interés en los mercados.
