El yuan ha roto este lunes la barrera psicológica de los 7 dólares. Esto ocurrió días después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, decidiera imponer nuevos aranceles a los productos importados de China.
La guerra comercial entre Pekín y Washington ha tenido sus consecuencias en los mercados. El Dow Jones, principal indicador de Wall Street, ha tenido pérdidas de más del 3%. En Europa tampoco ha ido bien. Por un lado, al Ibex 35 perdió un 1,35% y la Bolsa de Londres tuvo la mayor caída con pérdidas del 2,47%. Por otro lado, el CAC francés y el DAX alemán retrocedieron un 2,19% y 1,80%, respectivamente.
Oficialmente el Banco Popular de China, asegura que esta situación es consecuencia del mercado y reconocen su relación con la subida arancelaria de los Estados Unidos. En tanto, el gobierno chino prometió responder luego de que Trump anunciase tasas adicionales del 10% a productos chinos valorados en 300.000 millones de dólares a partir del 1 de septiembre.
Según el portal de noticias financieras Yicai, cada dólar se intercambiaba por 7,0258 yuanes según la tasa «onshore». Dicha moneda opera en los mercados locales, tras haber subido un 1,23% en las operaciones de la mañana, lo que supone la cuota más alta desde abril de 2008.
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Las medidas anunciadas por Trump tenían como justificación la supuesta manipulación de Pekín de su divisa para evitar que se aprecie en exceso, que reduciría la competitividad de sus exportaciones. La depreciación del yuan significa que los productos chinos en dólares son más baratos, lo que compensaría el impacto que tendrían los nuevos aranceles. Sin embargo, las importaciones se verían afectadas así como también el nivel de consumo de las familias chinas.
Según diversos analistas, esta guerra comercial está lejos de terminar y podría ir escalando en el tiempo pues habrían abandonado la idea de un acuerdo comercial con Estados Unidos. Asimismo, la administración de Trump ha hecho un llamado a la Reserva Federal para depreciar su moneda también.
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