El proyecto de construcción del mall “Arenas” en Coquimbo ratifica no sólo el desarrollo poblacional sino también inmobiliario que experimenta la ciudad puerto, que está cambiando de manera significativa su rostro con obras viales importantes, edificios en altura y las proyecciones auspiciosas para la actividad portuaria.
En las últimas décadas se aprecia un proceso evolutivo en la construcción de los megacentros comerciales, con tiendas ancla, y la región no ha quedado ajena a este crecimiento.
De hecho, el país es el primero en Latinoamérica en superficie de malls, superior a Brasil, Perú, Argentina y Colombia, lo que es un buen indicador, además, de la calidad de vida y cada vez es mayor el número de visitantes de estos centros comerciales, que tienen todas las instancias para cubrir los requerimientos ciudadanos, destacando en ellos no sólo las grandes tiendas y locales menores sino también los cines, restaurantes, patios de comidas y variadas entretenciones.
Las ventas van, también, en constante aumento en los más de 70 recintos de este tipo que existen en el país.
De allí que el anuncio del proyectado mall “Arenas” en el puerto, de modernas y definidas líneas arquitectónicas, de acuerdo con el diseño, es bien recibido, pero hay factores que deben ser considerados con criterio y visión futurista.
Uno de ellos se relaciona con las vías de acceso y áreas de estacionamientos ya que un lugar que presenta problemas de expansión, como pareciera ocurrir en Coquimbo, en las inmediaciones de lo que será el edificio consistorial, cerca de la Avenida Costanera, lugar ya colapsado por un intenso tráfico vehicular, sumado al transporte de carga en el período de exportación frutícola.
Este es un tema que merece especial atención de aprobarse iniciativas como la señalada propuesta, que se traducirá en generación de fuentes de trabajo, tanto de manera temporal, durante la ejecución de las obras, como de manera permanente en el plano comercial.