SMU admitió que detectó nuevos problemas en sus estados financieros, los cuales se suman en sus errores de contabilización de casi el 40% de sus contratos de arrendamiento. La empresa comunicó a la Superintendencia de Valores y Seguros que concluyó el análisis de las partidas relativas a sus gastos financieros, las cuales incluyen “Gastos de Personal”, “Servicios Básicos” y “Materiales” del rubro “Gastos de Administración y Ventas”.
Admitió que se debe realizar un ajuste de mayores gastos de administración y ventas por US$10,9 millones, cuyo efecto en el resultado al 31 de marzo del año en curso, neto de impuestos, asciende a US$8,7 millones.
Las razones para concretar estos ajustes, según la compañía, radican en una mayor provisión de gastos por bonos al personal, que a la fecha de la emisión de los estados financieros de marzo de 2013 debió ser contabilizada, y “en haber tenido que reconocer en gastos a marzo de 2013 algunos del período que se estaban difiriendo durante el presente año”.
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