Parque Arauco, una de las principales empresas del sector de real estate de América Latina, tuvo que adaptarse a nuevas maneras de hacer las cosas desde el inicio de la pandemia.
“El año 2020 puso a prueba la gran capacidad de resiliencia de la industria inmobiliaria frente a los enormes desafíos. Nosotros tuvimos que adaptar nuevas maneras de hacer las cosas, buscando formas innovadoras de seguir desarrollando nuestros activos”, sostuvo Salvador Said, presidente del directorio de Parque Arauco.
Según el reporte de resultados del cuarto trimestre del 2020, los ingresos de Parque Arauco a nivel regional fueron de 43,460 millones de pesos chilenos, lo cual representa al 75.1% de los ingresos del obtenidos en el cuarto trimestre del 2019.
Ello va en línea con el 75% de ABL promedio abierto a finales de año, el EBITDA alcanzó 28,789 millones de pesos chilenos siendo un 68.1% del EBITDA alcanzado en el mismo periodo del 2019.
El Perú representó el 24.1% (aproximadamente S/ 49 millones) del ingreso total, porcentaje con una disminución con respecto a la participación que tuvo en el mismo periodo del 2019, siendo una representación de 30%.
En el 2020 se puede notar que el segundo trimestre fue el más afectado por la pandemia del Covid-19, aquí el ingreso fue de S/ 17 millones de soles, para el cierre del año se observa una recuperación en los ingresos alcanzando los S/ 49 millones.
La ocupación de los centros comerciales de Parque Arauco en el Perú se vio afectada por las medidas efectuadas del gobierno, como la inmovilización, por lo que la ocupación total de los centros comerciales ha sufrido una disminución, cerrando el año con un indicador del 87 por ciento.
Hasta fines del año pasado, Parque Arauco tenía 17 centros comerciales en Perú, siendo MegaPlaza Norte y Larcomar los que representan más del 50% de ingresos en el país.
INVERSIÓN TECNOLÓGICA
Durante 2020 Parque Arauco invirtió US$ 278 millones en proyectos de ventas en línea y de contadores de flujo.
El primero con el objetivo de recibir con mayor periodicidad la información de ventas de nuestros locatarios, mientras que el segundo buscó aumentar nuestra capacidad de medición de flujos de público en los centros comerciales, de manera que la recolección de datos sea más eficiente y completa.