La actividad económica del Perú creció en marzo (+3.2%) a un ritmo mayor al registrado en enero y febrero. Sin embargo, el resultado estuvo por debajo del 3.5% esperado por el consenso de analistas, según la agencia Thomson Reuters.
Con este resultado el Producto Bruto Interno (PBI) cerró el primer trimestre del 2019 (1T19) con una expansión de 2.3%. El resultado de marzo, más débil de lo esperado, se debió a una aceleración de los sectores no primarios vinculados a la demanda interna menor a lo previsto, según indica el Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank.
LEE TAMBIÉN: Economía peruana se acelera y crece 3.19% en marzo del 2019
Con excepción del sector Construcción (+5.8%), el efecto positivo de dos días útiles más en marzo debido al “efecto calendario” tuvo un impacto marginal, en especial en los sectores Servicios (+3.9%) y Comercio (+3.0%).
De otro lado, los sectores primarios mostraron una recuperación, en línea con lo esperado, debido básicamente a la normalización de la producción de refinado de metales -que benefició a la Manufactura Primaria (+2.5%)- y a la recuperación de Minería e Hidrocarburos (+0.2%) -luego de seis meses consecutivos de caída-, impulsada por la mayor de producción de cobre -debido a la ampliación de la mina Toquepala de Southern- y estaño.
Para abril el Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank estima que el PBI haya registrado su tasa de crecimiento mensual más baja del 2019, inclusive menor al 1.6% reportado en enero. Lo anterior se sustentaría en los siguientes factores:
• Un efecto estadístico negativo. En abril del 2018 el PBI registró una expansión de 7.9%, la tasa de crecimiento mensual más alta del año anterior.
• Dos días útiles menos debido al “efecto calendario”. Los feriados de Semana Santa se celebraron este año en abril y no en marzo como en el 2018. Si bien este efecto no fue tan importante en marzo -cuando jugó a favor-, sí habría afectado en abril, lo que se habría reflejado en la producción de electricidad (+3.2%, la más baja del 2019).

• La menor producción de cobre de Las Bambas. Si bien las protestas sociales se iniciaron en febrero, los efectos del bloqueo del corredor minero se hicieron notorios en las exportaciones de marzo y habrían afectado la producción durante las dos primeras semanas de abril.
• El impacto negativo de la pesca de anchoveta. Al margen de la menor cuota de captura fijada (2.1 millones vs. 3.3 millones del 2018), la primera temporada se inició en mayo a diferencia del 2018 cuando empezó en abril.
LEE TAMBIÉN: ¿Por qué los nuevos hogares peruanos han reconfigurado el consumo?
• El menor consumo de cemento. El consumo nacional de cemento en abril alcanzó 905 mil toneladas, mostrando un aumento de 3.4%, tasa menor al 4.8% de marzo. No obstante, Scotiabank precisa que la actividad económica empiece a mostrar una gradual aceleración a partir de mayo, en la medida que se disipen los efectos negativos sobre los sectores primarios –pesca y minería- y se consolide la recuperación de la inversión pública -creció en marzo y abril luego de caer en el primer bimestre-.
Así, el Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank estima que el PBI crezca cerca de 3.0% en mayo y alrededor de 4.0% en junio, con lo cual cerraría el segundo trimestre (2T19) con una expansión de 2.8%, mayor al 2.3% registrado durante el 1T19.
Esta noticia es auspiciada por:
