De esta manera, Perú se coloca en el puesto 41, cayendo cuatro lugares con respecto al año 2009, cuando se ubicó en el puesto 37.
De acuerdo con el estudio, este resultado revela que la competitividad de Perú todavía no incorpora sólidamente a su crecimiento económico factores determinantes como la calidad de vida, el desarrollo tecnológico, la infraestructura productiva, el capital humano, el fomento a la inversión, entre otros.
En ese sentido, uno de los puntos que afectó la competitividad del país fue la desaceleración de la economía, la cual fue abrupta pues pasó de una tasa de crecimiento de nueve por ciento en el 2008, a tan sólo uno por ciento el año pasado.
Según los datos, si bien la falta de empleo no es un problema en el caso peruano, pues mejoró del puesto 36 al siete, sí lo es la calidad del mismo.
Además de ello, la eficiencia en el gobierno quizá sea el mejor indicador que Perú posee en el presente ranking, donde logró mejorar en seis posiciones al pasar del puesto 41 al 35.
En lo que respecta a productividad y eficiencia, y mercado laboral, el país ha descendido nueve posiciones en cada caso, lo cual se explica por la debilidad en indicadores como capacitación, motivación, mano de obra calificada, competencias a nivel gerencial, entre otros.