Se conoce la excelencia de la gastronomía peruana pero pocos la riqueza textil del país andino, utilizada por grandes firmas, pero hoy Perú ha destacado en materia de moda y ha protagonizado, como país invitado, la pasarela Madrid Fashion Week, con tres de sus diseñadoras insignia.
Las creadoras peruanas Merche Correa, Sitka Semsch y Jessica Butrich, han mostrado sus colecciones para la próxima primavera-verano 2014 conjugando la extrema calidad de las fibras peruanas, como los algodones pima y tangüis, la alpaca y la vicuña, con un personal diseño inspirado en la tradición milenaria de Perú.
“Creo que tenemos mucha riqueza en el pasado, las culturas preíncas, mucho de donde sacar inspiración, de donde partir”, ha declarado la joven diseñadora Jessica Butrich, quien ha reconocido estar “emocionadísima”, ya que es la primera vez que ha desfilado fuera de Perú y “muy contenta” con su colección en la que ha mezclado “clásico, romántico y súper femenino con algo de pop que viene de lo gráfico”.
Butrich, que quiere que “los ojos del mundo estén en Perú” porque hay “mucho talento” y “un futuro gigante para mezclar tradición y vanguardia”, se declara obsesiva “con todo lo antiguo, lo retro y los cortes modernistas”, algo que ella califica como el “ADN” de sus colecciones.
La veterana Sitka Semsch, que desfila desde hace diez ediciones en la pasarela madrileña y ha participado en desfiles en Colombia, Panamá y Estados Unidos donde recibió el premio “New Star in Fashion”, ha plasmado en su colección “la fusión” de la cultura peruana. “Uno cree que el Perú es solo alpaca, Machu Picchu… y tenemos nuestro punto de vista con calidades maravillosas que ponemos en diseño”, declaró.
Semsch, única diseñadora latinoamericana en participar desde 2004 en Mercedes-Benz Fashion Week Russia, se define como “clásica-contemporánea” y afirma que su referencia siempre es Perú porque tiene “tanto” que rescatar, “desde costa, selva, sierra, fibras, texturas, materiales” que le gusta incorporar “unas veces de forma más evidente y otras más sutil” en todas sus propuestas.
Merche Correa, la más veterana, tras 15 años de carrera en el diseño de moda, es contundente. Ella “existe” porque “existe Perú” y quiere llevar su moda “a lo más alto” para que se identifique “el diseño y la artesanía peruana por el mundo”. Correa, “Embajadora de la Marca País” y mención honorífica por el trabajo “Las Flores de mi Tierra” en la Bienal Iberoamericana de diseñadores de Madrid, dice que Perú es “una cultura viva” llena de artesanos que “dominan la mano de obra” en cuero, bordados, cobre, bronce, hueso de toro, madera, textiles. “Es inacabable”, afirma.
Correa siente “fascinación” por las faldas coloristas, de grandes volúmenes, con flores bordadas, que se usan en casi todas las regiones de Perú y que la diseñadora ha mostrado en la pasarela madrileña, en lo que considera su “misión” de recuperar la historia milenaria, la tradición de la civilización Parcas, cuya forma de vestir expresa su forma de vida y se puede ver en comunidades andinas como Chincheros (Cusco) o Taquile (Puno).
