Los pop-ups o tiendas emergentes, son la nueva tendencia del merchandising, que busca generar emoción, novedad, diversión.
Pero estas tiendas o ventanas emergentes se están convirtiendo en algo más que una tendencia. Son un elemento importante en la mezcla de marketing. Casi se podría decir que la siguiente fase de las tiendas pop-up, son sus presentaciones físicas que integrarían el comercio electrónico.
Tomemos, por ejemplo a BaubleBar
BaubleBar es un joven minorista de bisutería de calidad, aparentemente exitoso en línea. Cuya premisa, es traer grandes accesorios a las mujeres, en un mercado que es inferior a lo que las tiendas físicas tradicionales y grandes almacenes tienen. Pero ellos se enfrentan a un obstáculo importante, captar clientes en línea.
Las mujeres simplemente no confían en la calidad de las mercancías por mirar una imagen de pantalla, ellas tienen que ver los productos y tocarlos. Y la respuesta a esto es sin duda una tienda de Pop-Up. Cuando BaubleBar implemento sus dos primeros pop-ups, tuvieron tanto éxito, que acaban de abrir 35 tiendas de este tipo en Nordstrom.
Durante 8 semanas, BaubleBar probó que las tiendas pop-up se han convertido en una herramienta clave para la captación de clientes y se está convirtiendo en todo negocio.
Considere también The Tailor Shop de Indochino (que este año habilitará 12 pop-ups, para seguir construyendo su base de clientes), también Guide Shop de Bonobos. Estos “pop-ups” permiten a un cliente potencial, sentir la tela e incluso, pueden conseguir la ropa a medida.
A pesar de que son “temporales” y a menudo se mueven a nuevos lugares, se han convertido en un elemento regular y constante del plan de marketing de cualquier minorista. Eso es porque es una iniciativa clave de adquisición de clientes.
Introducción de Nuevos Productos
Además, los pop-ups pueden servir como un elemento clave en la introducción de un nuevo producto.
Por ejemplo hablemos de unos zapatos con una innovación maravillosa. El problema sería que la mujer promedio ni siquiera sabría por qué tienen sentido práctico. Así es que la empresa se enfrentaría a un problema grave, como es la educación del cliente. Entonces una bien pensada tienda pop-up, como estrategia, podría resolver ese problema.
Otro ejemplo es una empresa que cuente con una nueva forma de sujetadores de ajuste en función del volumen. Pero nuevamente las mujeres no entenderían lo que esto significa y cómo les beneficia en términos de confort y apariencia. Entonces la empresa se daría cuenta de la estrategia emergente, pero se estancaría en ponerla a cabo, buscando una tienda perfecta que venda al por menor.
Y es que el problema no es necesariamente el escaparate perfecto, sin embargo los socios y hasta cierto punto el cliente tradicional, pensarían eso. Lo que podría significar una tienda con un enfoque primitivo, en un momento en que las mujeres son modernas y han cambiado.
Cómo reducir el costo de Devoluciones
En el 2012 pasaron cinco millones de dólares en devoluciones. A partir de Zappos, el cliente ha sido entrenado para esperar el envío libre. Esto significa que cada tienda en América se ha convertido en una sala de montaje.
Pero ¿Qué tal llevar un paso más allá e instalar una tienda pop-up, incluyendo un espacio para probador? Ofreciendo esto, el cliente podría reemplazar la oferta de envío gratis y la empresa reducir costos innecesarios de forma espectacular.
¿Cómo los mejores minoristas tradicionales ingresan en esto? Mediante alianzas, por ejemplo eTail shop-in-shop, necesita tiendas físicas y a su vez los minoristas pueden utilizar a eTail para probar nuevas categorías en sus tiendas y generar interés que mueva más tráfico, al tiempo que reduce los costos, utilizando un modelo de concesión.
En conclusión se prevé un futuro co-venta al por menor con las asociaciones entre las tiendas físicas y pop-ups, ya que ambas pueden construir un negocio prospero entre los dos.