El año pasado, Burger King y Wendy’s decidieron cerrar sus operaciones en Costa Rica. Los establecimientos permanecieron cerrados durante algún tiempo, hasta que otras marcas de comida rápida decidieron aprovechar la oportunidad.
Según el portal La República.Net, las franquicias que no dudaron en apropiarse de las instalaciones, son: KFC, Taco Bell, Carl’s Jr. y Popeyes.
KFC
La publicación revela que en el caso de KFC, en mayo próximo abrirá un local en Nicoya, en el mismo establecimiento donde Burger King tenía su punto de venta y para la remodelación, compra y apertura de este local invertirá más de US$ 1 millón.
“Es una ubicación ideal para cualquier compañía, tiene la afluencia de personas, es un restaurante ‘stand-alone’ de los que más atesoraba Burger King”, añadió Isidro Perera, gerente general de KFC.
KFC tiene interés en otros tres puntos donde Burger King tenía presencia, ubicados fuera de la Gran Área Metropolitana (GAM) de Costa Rica.
POPEYES
Por su parte, Popeyes, franquicia especializada en pollo frito, abrió en julio del año pasado un local ubicado en Santo Domingo de Heredia, en un establecimiento que era también de Burger King, el cual cerró en febrero de 2015, alegando poca rentabilidad.
Para este nuevo establecimiento comercial, la cadena de comida rapida invirtió US$ 400 mil en las tareas de remodelación, informó Virya Navarro, gerente de Mercadeo de Popeyes.
Además, este fast food está interesado en otros cuatro locales que Burger King dejó en este país, tres se ubican dentro de la capital.
Popeyes además aprovechó la salida de Pollo Tropical, que del mismo modo fue manejado por los mismos dueños de Burger King en 2012, al abrir en la primera semana de enero en Escazú, donde se ubicaba la firma que también vendía pollo.
¿QUÉ DEJARON LOS FAST FOOD QUE SE FUERON?
Burger King dejó 29 restaurantes, de los cuales, cerca de unos 14 puntos son los que están en proceso de alquiler o venta.
En cuanto a Wendy’s, que era manejado por Corporación Raventós, mantenía diez locales, tres de los cuales fueron alquilados a Carl’s Jr., entre éstos: Multiplaza Curridabat, Multiplaza Escazú y el que estaba en Santa Ana. Los tres puntos fueron abiertos en noviembre anterior.
Taco Bell, por su parte, aprovechó los locales de Wendy’s en Alajuela y Heredia, según Javier Gallegos, uno de los integrantes del Grupo Raventós.
La ubicación de los locales es uno de los puntos a favor para las cadenas de restaurantes, puesto que son difíciles de adquirir y ya tenían un mercado al que atender.
“Esos puntos son muy buenos, ya fueron estudiados y si se construyeron ahí es que de verdad surtieron efecto, sin embargo, siempre realizamos estudios de mercado para medir la rentabilidad de un punto”, sostuvo la gerente de Mercadeo de Popeyes.