Por Oscar Ibazeta
Hace algunos meses, un amigo me mostró un proyecto que venía preparando durante varios meses, el modelo de un pequeño pero original negocio. Me pidió que le diera una opinión, pues esperaba ingresar a un Centro Comercial que acababan de inaugurar. Luego de revisar con detalle en qué consistía su modelo de negocio, le auguré que le iría bien. Pasaron los meses y no le fue bien, le fue espectacularmente bien.