La compañía de moda estadounidense Ralph Lauren sigue los pasos de Abercrombie&Fitch y Forever21 y cerro su ‘flagship store’ en la ciudad de Hong Kong.
El cierre de Ralph Lauren, que se efectuó la semana pasada, se suma a una lista de otras clausuras como consecuencia del elevado precio de los alquileres de los locales comerciales y el descenso del turismo chino, entre otros factores.
El año pasado, Coach también bajó la persiana a una de sus mayores tiendas en Hong Kong.
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El grupo estadounidense, inmerso en un proceso de reestructuración, culminó el primer semestre con un resultado neto de 23 millones de dólares (20,8 millones de euros), un 89,7% menos que en el mismo periodo del año anterior.
El grueso de las ventas procedió de las tiendas propias del grupo, que generaron una facturación de 1.849 millones de dólares.
La compañía espera que el plan suponga un ahorro de costes de entre 180 millones de dólares y 220 millones de dólares a cierre del ejercicio 2017.
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