El comercio es uno de los sectores que ha evidenciado la desaceleración. Frente a esto, la industria ha evaluado diversas estrategias para hacer frente a la menor demanda. Una clave es repotenciar el negocio financiero, el cual se vio impactado, primero, por el fraude de La Polar y, por consiguiente, con las nuevas regulaciones derivadas de la estafa.
La industria del retail, principalmente compañías que apuntan a segmentos más bajos, está buscando elevar su cartera de colocaciones apuntando e este nicho, el cual ha sido dejado de lado por la industria bancaria, precisamente, producto de la baja en la economía.
El IEF del Banco Central del primer semestre de 2014 da cuenta de esta situación: “La deuda de consumo, luego de varios trimestres, muestra un crecimiento de la deuda promedio mayor al del número de deudores. Este menor crecimiento de los deudores es coherente con la contracción que desde mediados del 2013 se observa en las áreas especializadas de consumo de la banca”.
Se añade que la deuda de los hogares continúa creciendo a tasas similares a las observadas en períodos previos, con una mayor participación del crédito bancario, cuyo crecimiento se ha producido principalmente por un incremento de la deuda promedio.
Esto se ha traducido en un leve aumento del endeudamiento agregado sin un deterioro en los indicadores de pago, sostiene el Central. Lo anterior, dijo, es coherente con la mayor oferta relativa de deuda hacia hogares de ingresos medios y altos mencionada en los IEF previos.
No obstante, los hogares de ingresos más bajos tienen mayores restricciones de la banca para optar a crédito. Y es ahí donde está entrando el retail, que también -en el caso de grandes compañías como Cencosud y Falabella- está apuntando a segmentos de mayores ingresos.
“En el consolidado, existe un crecimiento debido a los procesos de migración de las grandes empresas del retail, las cuales están ingresando a sectores de mayores ingresos los cuales estaban orientados principalmente a la banca”, destaca Claudio Ortiz, gerente general de Retail Financiero.
Más cautela
Los retailers, pese a apuntar a crecer en el negocio de retail financiero para potenciar las ventas frente a una desaceleración, mantienen una revisión exhaustiva de los sujeto de crédito para evitar elevar el porcentaje de riesgo de sus carteras.
Tras el fraude revelado en La Polar, el negocio financiero de las multitiendas cayó con fuerza. En la industria se hablaba de haber pasado de una era de la masificación del crédito a otra en que primara la calidad, en que se analizaba con pinzas quiénes eran sujeto de crédito. Todo para evitar sumar malos pagadores a sus carteras. El negocio también se vio impactado tras el llamado perdonazo (por una ley de por medio) que implicó la eliminación por única vez de los registros de morosidad de las personas con deudas por hasta $2,5 millones y publicadas al 31 de diciembre de 2011.
La industria aún está convaleciente, pero está evidenciando notorias mejoras tras la crisis de La Polar. De hecho, desde que estallara el fraude, la industria ha logrado recuperar más de 1,1 millón de tarjetas activas.