Los retailers nativos digitales conocen bien el valor de entender y usar herramientas tecnológicas para mejorar la experiencia de sus clientes.
Los comercios digitales saben que tener un local físico equipado con nuevas tecnologías les permite registrar la percepción de los clientes por medio del vídeo y el audio de las tiendas.
Y es que el espacio físico permite a los consumidores experimentar y crear lazos con una marca, sus productos y su cultura.
Además, las tiendas tradicionales están sirviendo como centro de distribución de sus productos.
Actualmente, los datos y la tecnología son un tejido conector básico que permite crear experiencias ricas en las tiendas. De esta manera, están señalando el camino a seguir.
CUATRO ESTRATEGIAS IMPORTANTES
1. CREAR TIENDAS LIBRES DE INTERFERENCIAS
Los retailers online se centran en la experiencia usuario y en el camino que recorren sus clientes hasta llegar a su página.
Ahora, muchos de los comercios minoristas están aplicando la misma teoría a las tiendas físicas.
Amazon Go, la tienda de alimentación, ha resuelto lo que considera la mayor incomodidad de los clientes a la hora de comprar: el pago.
De acuerdo con el estudio de PwC, un cuarto de los consumidores hace este tipo de compras, de menos de cinco minutos, una vez al día por lo menos.
2. USAR LOS DATOS
Los retailers digitales tienen un enfoque data-centric desde su nacimiento, lo que les ha permitido ser mejores en la predicción de las necesidades y deseos de los clientes que sus competidores tradicionales.
La presencia física de las marcas en zonas muy concurridas también puede ser una herramienta de marketing muy potente.
Asimismo, los vendedores también se están sirviendo de los datos para conocer mejor a sus clientes.
3. HACER LAS COMPRAS DIVERTIDAS
La personalización puede convertir las compras en una tienda física en una experiencia que los consumidores desean tener.
El local de moda de Rebecca Minkoff, situado en Nueva York, ha apostado por las nuevas tecnologías para mejorar la experiencia de los clientes.
En los probadores, los espejos interactivos permiten a los clientes escoger un color o talla diferente con solo unos toques. Además, los clientes pueden regular las luces del probador para ajustarla a la del entorno en el que lucirán las prendas.
4. CAMBIOS EN LA MEDICIÓN DE VENTAS
Tradicionalmente, los retailers han medido su éxito en función de las ventas por metro cuadrado. Basándose en esta fórmula, muchas cadenas han tenido que cerrar.
Pero, ahora, la gente ya no depende de las tiendas físicas como la única manera de acceder a los productos, por lo que esta fórmula para medir la rentabilidad ha quedado desfasada.
El año pasado, Adobe Labs reveló una nueva tecnología que permite rastrear a los consumidores en una tienda a tiempo real. La información se recoge a través de beacons, carros de la compra inteligente, sensores de IoT y aplicaciones móviles.