Víctor Casco, Parlamento de Extremadura por la Izquierda Unida (la tercera fuerza política del país), ingresó a un Carrefour de Mérida junto con otras cien personas y vaciaron la tienda para repartir lo robado a lo pobres. este es el segundo caso de “Robin Hood” en lo que va del mes en España.
Lo anterior es una calca de lo que hizo hace un par de semanas su compañero andaluz de partido Juan Manuel Sánchez Gordillo. En este caso el nuevo Robin Hood convocó a un grupo de trabajadores de la Plataforma por la Renta Básica en la ciudad de Mérida (suroeste del país) para convertirse en un nuevo grupo de “paladines” y, nunca mejor dicho, hacer justicia por su propia mano.
El acto consistió en lo que Casco y compañía llamaron “expropiación de alimentos”, según reconoció el propio diputado en su cuenta oficial de Twitter, y en la que también indica que la acción busca “frente a la acaparación de riqueza por unos pocos, reparto de la riqueza”.
Eso sí, este nuevo Robin Hood extremeño aclaró que se llevaron del Carrefour simplemente “productos de primera necesidad” y de “marcas blancas” que “no tienen nada que ver con el imperialismo”.
No pasaron ni cinco minutos cuando llegaron hasta las puertas del supermercado un grupo de agentes de la Policía Nacional que identificaron a algunos de los participantes en la acción, y que trataron de impedir –sin éxito- que los manifestantes sacaran los carritos de la compra repletos de alimentos.
Fuentes del Ministerio del Interior consideran que esta imagen, y lo realizado por Sánchez Gordillo, dañan la imagen exterior de España. Eso sí, se insistió en que ninguno de estos dos Robin Hood puede ser detenidos debido a su condición de parlamentario.
“Ahora mismo en el Carrefour en un acto de protesta y rebeldía: expropiación de alimentos”, se lee en el Twitter de Casco. “Frente a la acaparación de riqueza por unos pocos reparto de la riqueza”, advertía.