Rusia señaló que restringirá el acceso a Facebook, la empresa de Mark Zuckerberg, acusándola de “censurar” a los medios de comunicación rusos, la última de una serie de medidas contra los gigantes de las redes sociales de Estados Unidos.
El gobierno de Vladimir Putin lleva años intentando ejercer un control más estricto sobre internet y las grandes empresas tecnológicas, algo que, según los críticos, amenaza la libertad individual y empresarial, y forma parte de una ofensiva más amplia contra los opositores abiertos al gobierno ruso.
El regulador estatal de las comunicaciones dijo que Facebook había ignorado sus demandas de levantar las restricciones a cuatro medios de comunicación rusos en su plataforma: la agencia de noticias RIA, la red de televisión Zvezda del Ministerio de Defensa y los sitios web gazeta.ru y lenta.ru.
No estaba claro de inmediato en qué consistirían las restricciones rusas a Facebook. Pero cabe recordar que el año pasado, el gobierno de Putin redujo la velocidad de Twitter en una medida castigadora.
“De acuerdo con la decisión de la Fiscalía General, a partir del 25 de febrero, Roskomnadzor está imponiendo restricciones parciales de acceso a la red social Facebook”, dijo el regulador, Roskomnadzor, en un comunicado.
Zuckerberg le responde a Putin
La empresa matriz de Facebook, Meta, afirmó que Rusia aplicó restricciones a esta y otras redes sociales de la empresa después de que la plataforma se negara a dejar de verificar la veracidad de la información que emiten los citados medios rusos.
“Las autoridades rusas nos ordenaron que dejáramos de verificar y alertar sobre el contenido publicado por cuatro medios de comunicación controlados por el estado ruso”, escribió Clegg, Nick Clegg, vicepresidente de Meta. “Nos negamos. Como consecuencia, anunciaron que restringirían el acceso a nuestros servicios”, apuntó.
La invasión de Ucrania ha dado lugar a un estallido de noticias falsas en internet, sobre todo en las redes sociales, un fenómeno que se ha vuelto recurrente cada vez que hay una guerra.
“Los rusos están usando nuestras aplicaciones para expresarse y organizar acciones. Queremos que se escuchen sus voces”, respondió amenazante la empresa de Mark Zuckerberg a través de un comunicado.