Samsung Electronics reportó hoy que sus ganancias operativas entre abril y junio crecieron un 47.5% respecto al año anterior, sumando unos US$8,540 millones.
Pero pese a estos ingresos récord, la empresa surcoreana se encuentra bajo una creciente presión para producir nuevos smartphones atractivos después de que su negocio móvil se contrajo un 3.5% en el segundo trimestre. La empresa tecnológica manifestó que el crecimiento global de las ventas de teléfonos inteligentes podría debilitarse en el tercer trimestre y espera una competencia más dura debido al lanzamiento de nuevos productos.
Ante el menor crecimiento del mercado de smartphones, que Samsung domina junto con Apple, la firma asiática ahora está enfrentando problemas para convencer a los inversores de que puede sostener su sólida expansión explotando el segmento económico y más popular.
Sus competidores en ese segmento incluyen a firmas chinas como Huawei Technologies y ZTE, nativas del mayor mercado de teléfonos inteligentes del mundo.