Las cadenas de supermercados en España mantuvieron en 2020 el fuerte ritmo de aperturas de años anteriores, aunque cada una con su estrategia: mientras que Mercadona no creció en tiendas, pero las reubicó para hacerlas más grandes, Carrefour siguió una política expansiva frente a los numerosos cierres del grupo DIA.
El sector en general se ha mostrado inmune -en lo que a aperturas se refiere- a la crisis provocada por la pandemia, y de hecho sus ventas aumentan (se estima un crecimiento medio del entorno del 10 %) como consecuencia del menor consumo fuera del hogar, aunque las empresas recuerdan que la covid-19 también ha implicado un incremento de costes que reduce su margen de beneficio.
La red de supermercados en España ya supera los 24.500 establecimientos y en los últimos años crece a un ritmo de 270 aperturas anuales, según datos de la consultora Retail Data que reflejan diferencias notables entre los operadores líderes, publicó la agencia de noticias EFE.
MERCADONA
El primer puesto en cuota lo ocupa -con casi un 25 %- Mercadona, cuyo presidente, Juan Roig, ya reconoció que la compañía había “tocado techo” en España en número de locales; por ello, su política se basa ahora en renovar su parque de tiendas y sustituirlas por comercios más grandes, a lo que se suma su “aventura” en Portugal.
De hecho, en 2020 la compañía cerró cinco supermercados y acabó el año con 1.621, y sin embargo aumentó en 40.000 metros cuadrados su superficie de venta, hasta sobrepasar los 2,4 millones de metros.
“Mercadona está haciendo una reestructuración de su red y está pasando de tiendas de 1.500 metros a rondar ahora los 1.800, en parte debido a su apuesta por el negocio de la comida para llevar”, explica la socia de Retail Data Raquel Segura.
La especialista asegura que la empresa de origen valenciano está optando por abrir nuevos locales en mejores ubicaciones y cerrar otros situados en la misma ciudad, una estrategia de “recolocaciones” que también siguen la mayoría de sus competidores.
CARREFOUR
Carrefour (con una cuota superior al 8 %, según Kantar) ha acelerado su apuesta por la proximidad: conserva sus hipermercados y crece en supermercados, sobre todo a través de la enseña Express -muchos de ellos franquiciados- y por su colaboración con las gasolineras de Cepsa.
El grupo francés acabó 2020 con 1.240 tiendas, casi un centenar más que un año antes; a este número se sumarán en 2021 los establecimientos que compró en agosto a Supersol (originalmente eran 172), una operación todavía pendiente del visto bueno de Competencia.
Segura enmarca esta expansión en una apuesta decidida de la compañía por el mercado español, pero también por “aprovechar el hueco dejado por DIA”, víctima de una crisis que ya parece superada pero que ha provocado el cierre de numerosas tiendas.
DIA
El grupo DIA (con menos de un 6 % de cuota) inició una nueva etapa en 2019 y sus gestores decidieron “sacrificar” las tiendas con peores cifras en términos de rentabilidad. Sólo en 2020 cerró unos 200 supermercados, y aun así sigue siendo la compañía con mayor número del país: 2.842 a finales de diciembre, según Retail Data.
En esta fase, la firma da por superada su crisis y se centra en reforzar la venta “online”, además de sus novedades en logística, relación con las franquicias y su marca blanca.
Fuentes del sector coinciden en que DIA da señales de estar “remontando”; de hecho, sus responsables ya anunciaron en septiembre que pretenden abrir medio millar de nuevos establecimientos -en su mayor parte, a través de franquiciados- en un plazo de tres años.
LIDL
La germana Lidl (5,7 % de cuota) pisa los talones a DIA y durante el último año aumentó su red con más de una treintena de supermercados, hasta sumar 620 en toda España.
Un portavoz de la empresa cifra la inversión en aperturas en más de 240 millones de euros durante el 2020, tanto en nuevas tiendas como en reubicaciones para sustituir establecimientos “obsoletos”, además de otras dos plataformas logísticas (Valencia y Gran Canaria).
“El objetivo es ampliar nuestro servicio y, en algunos casos, mejorar la ubicación. Queremos estar más cerca del cliente, y por eso muchas han tenido lugar en el centro de las principales ciudades”, detalla. El “modus operandi” de Lidl ha ido cambiando con el tiempo, ya que en un principio apostaba sobre todo por el extrarradio.
EROSKI
La cooperativa vasca Eroski (en el entorno del 5 % de cuota) completa el top-5 y terminó 2020 con 1.339 tiendas, 24 más que un año antes, una subida que se produce mientras crece el ‘runrún’ sobre su interés en desprenderse de Caprabo.
No en vano, dentro del sector ya existe el debate sobre hasta cuándo se podrá seguir abriendo tiendas a este ritmo sin dejar de ser sostenibles. Mientras que algunos esperan movimientos de concentración a corto plazo, otros inciden en que la clave está en su capacidad para hacer la tarta más grande y “robar” cuota al comercio tradicional, pero también a bares y restaurantes.