El discounter alemán Lidl prosigue su expansión en territorio español con dos aperturas realizadas de forma simultánea en las ciudades de Tarragona) y Málaga.
Ambas inauguraciones han supuesto una inversión conjunta de más de ocho millones de euros y la creación de 60 puestos de trabajo.
Estos supermercados se enmarcan en el plan de expansión de Lidl en España para 2014, que prevé una inversión de 180 millones de euros y la apertura de 20 puntos de venta.
Actualmente, la cadena cuenta en España una red de 530 tiendas, ocho plataformas logísticas (Valencia, Vitoria, Sevilla, Madrid, Barcelona, Coruña, Málaga y Tenerife) y un equipo humano integrado por 10.000 profesionales.
Además, la compañía mantiene el proceso de modernización y reforma del parque de tiendas existentes que la empresa está llevando a cabo desde 2011 para adecuarlas a la nueva imagen de la compañía y hacerlas más eficientes energéticamente.
En concreto, en 2014 se remodelarán un total de 50 establecimientos, en los que, entre otras actuaciones, se ampliará la sala de ventas así como el surtido de productos, especialmente los frescos.
Cada semana, más de 3 millones de clientes pasan por las tiendas de la firma y eligen alguna de las 1.600 referencias de marca propia exclusivas de la empresa.
Lidl, que entró en el mercado español en el 1994, con la apertura de la primera tienda en la ciudad de Lleida (Cataluña), aplica criterios de eficiencia energética y sostenibilidad medioambiental, tanto en el diseño como en la construcción de sus nuevos establecimientos.
Entre otros elementos, incluye sistemas de iluminación LED en todos sus puntos de luz, que permiten un ahorro de hasta el 50% del consumo energético frente a sistemas de iluminación tradicional.
La empresa alemana acumula desde 2008 una inversión en España superior a los 1.000 millones de euros, de los que 340 millones de euros se han invertido tan sólo en los dos últimos años