En los últimos años el subsector de supermercados mostró un importante dinamismo en la apertura de tiendas en el sector retail peruano, debido a que aún hay una baja penetración del canal moderno en el Perú, lo que ha incentivado su expansión, sobre todo hacia los sectores C y D, con formatos de rápida implementación y que apuntan a competir con las bodegas y las tiendas de conveniencia.
El subsector de supermercados presenta varios actores importantes, entre ellos tenemos principalmente a: Hipermercados Tottus, Supermercados Peruanos (Plaza Vea, Vivanda, Mass), Cencosud (Wong y Metro), quienes compiten a través de sus distintos formatos según el NSE al que se dirigen, puesto que actualmente los terrenos de grandes formatos son escasos y más costosos.
La fuerte competencia entre las grandes cadenas de supermercados se plasma en estrategias de precios bajos y ofertas para atraer y fidelizar a mas clientes. Además, los supermercados incorporan en su oferta un componente ‘non-food’, el cual tiene un ticket de venta promedio mayor, aunque es mas sensible a los ciclos económicos.
Dicho componente, el cual puede alcanzar hasta la tercera parte de las ventas, consiste en la oferta de electrodomésticos, artículos para el hogar, cuidado personal, entre otros.
Sin embargo, no todas las tiendas cuentan con oferta de productos non-food, dado que esto se define a través de los patrones de compra observados en las zonas donde tienen presencia.
En ese sentido, en ciertas zonas los clientes acuden al supermercado exclusivamente para adquirir productos de primera necesidad.

LEE TAMBIÉN: Estrategia de “precios bajos” de Plaza Vea eleva ventas de Supermercados Peruanos
COMPETENCIA DEL CANAL TRADICIONAL
El canal moderno afronta una fuerte competencia de parte del canal tradicional (bodegas y mercados), el cual representa el 70% de participacion en el Perú según la consultora internacional Kantar Worldpanel.
De acuerdo con lo señalado por Kantar, la preferencia del consumidor peruano por este canal radica en una serie de factores como cercanía, precio bajo, empatía con el vendedor y la confianza con el mismo.
Asimismo, se puede apreciar una tendencia a la baja en los indicadores de ‘Same Store Sales’, inclusive registrando niveles negativos en ciertos casos. Cabe recalcar que el desempeño menos favorable del componente non-food en una coyuntura de desaceleración económica también influye en dicha tendencia.
Durante el 2016, las ventas totales de los supermercados analizados alcanzaron S/11,776 millones, mostrando un crecimiento de 3.68 por ciento. Este resultado estuvo por debajo de años anteriores, toda vez que en el 2015 y 2014 el crecimiento a nivel del subsector fue superior al 9 por ciento, según indica un análisis del sector retail de Equilibrium Clasificadora de Riesgo a julio del 2017.

Esta noticia es auspiciada por:

[contact-form-7 id=”76878″ title=”Contacto Form_Capacitaciones”]
Discussion about this post