El reciente anuncio del Ministerio de Economía del Perú sobre la implementación del Impuesto General a las Ventas (IGV) a las plataformas digitales de streaming no residentes, como Netflix, Prime y Spotify, ha generado un amplio debate sobre el impacto que esta medida tendrá en los consumidores y en el mercado del entretenimiento digital.
A partir del próximo mes de octubre, estas plataformas estarán obligadas a pagar un 18% de IGV en el Perú, lo que podría traducirse en un incremento de las tarifas que actualmente pagan los usuarios.
Jorge Guillén, economista de Esan, estima que esta medida podría encarecer en un 18% las tarifas de estos servicios, lo que podría llevar a una reducción en la contratación de estas fuentes de entretenimiento.
Guillén argumenta que estos servicios no son esenciales, sino más bien productos de lujo dirigidos principalmente a los sectores A y B, y en menor medida al sector C. Por lo tanto, para muchos consumidores, prescindir total o parcialmente de ellos podría ser una forma de ahorrar o de ajustar su economía.
“Hay familias que tienen dos, tres y hasta cuatro cuentas de streaming; ahora van a tener una o dos”, señaló Guillén en una entrevista con TV Perú. Esta perspectiva sugiere que el encarecimiento de las tarifas podría llevar a una racionalización del uso de estas plataformas, afectando potencialmente la demanda.
¿Peligrará el streaming en Perú?
Ante el nuevo escenario tributario, Guillén advierte que muchos suscriptores podrían buscar alternativas gratuitas como YouTube o incluso recurrir a la informalidad cambiando el IP de sus dispositivos para evitar pagar impuestos. Esta evasión fiscal representaría un desafío adicional para la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) y para el sistema bancario, que tendrán que adaptar sus sistemas para gravar adecuadamente estos servicios.
Guillén recomienda al gobierno actuar con gradualidad y evaluar en el tiempo los impactos colaterales que esta medida puede generar. Sostiene que es crucial rectificar aquellos aspectos que puedan ser negativos para no afectar excesivamente el consumo y la recaudación fiscal.
El economista también recordó que en el pasado se intentó reducir el porcentaje del IGV (18%) con el objetivo de ampliar la base tributaria, pero esta medida no funcionó y el gobierno tuvo que restituir la tasa vigente. Este antecedente sugiere que cualquier cambio en la política tributaria debe ser cuidadosamente considerado y basado en un análisis exhaustivo de sus efectos.
Por su parte, el ministro de Economía, José Arista, anunció que el cobro del IGV a las plataformas de streaming generará una recaudación anual de 800 millones de soles. Arista explicó que el pago se realizará a través del sistema bancario en cada transacción que implique a estas empresas. Esta recaudación es vista como una manera de asegurar que estas plataformas contribuyan fiscalmente al país, pese a operar desde el extranjero.
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El Consejo de Ministros ha aprobado una norma que establece que, a través del sistema bancario, se cobrará un 18% sobre los servicios que estas empresas cobran por intermediación o prestación directa de sus servicios digitales y bienes a través de internet. Se otorgará un plazo de dos meses para que la Sunat y el sistema bancario realicen las modificaciones necesarias en sus sistemas para gravar adecuadamente estos servicios.
En una conferencia de prensa, Arista destacó la importancia de esta medida, afirmando: “Ellos están fuera del país y es muy difícil hacer que tributen. Aunque las normas establecen que deben pagar impuestos, no teníamos hasta ahora el mecanismo para lograr que lo hicieran”.
