Las compañías chinas como ZTE, Xiaomi y Huawei irrumpieron con fuerza en una cita como el Mobile World Congress (MWC) en la que el protagonista absoluto fue el Galaxy S5. Sin embargo, a continuación conoceremos un poco más sobre el Xiaomi M3, el Xperia Z2 y los tres móviles de Nokia que buscan revolucionar el mercado.
China muestra su poder con el Xiaomi
Xiaomi pretende demostrar que tiene el mismo potencial que pesos pesados como Apple y Samsung, por lo que en busca de seguir dando que hablar, esta inmerso en plena expansión por el continente europeo, con unos terminales de mucha calidad al precio más competitivo sin duda del mercado.
Muestra de ello es el Mi3, un móvil con una resolución de 1920 x 1080 en una pantalla de 5 pulgadas, cámara de 13 megapíxeles y que cuesta 319 euros libre en su versión de 16 GB.
Sony presentó el Xperia Z2
Pero los chinos no son los únicos que soreprenden con este nuevo equipo, de hecho Sony ha golpeado antes que sus rivales con el Sony Xperia Z2 tras el éxito del primer modelo que tenía en su cámara y en su resistencia al agua y al polvo sus principales armas.
El Z2 ha crecido hasta las 5,2 pulgadas, tiene un procesador Snapdragon 801 -Qualcomm MSM8974AB- a 2.3 Ghz, 3GB de RAM, 16 GB de memoria interna ampliables y una cámara de 20 megapíxeles, lo que la convierte en una de las mejores del mercado en móviles, siendo capaz de grabar en 4K.
Nokia apuesta por Android
Por su parte, Nokia ha aprovechado el Mobile World Congress para presentar no uno, como se esperaba, sino tres móviles con Android, en lo que era un secreto a voces de la apuesta de la finlandesa por un sistema operativo diferente de Windows Phone.
El Nokia X, Nokia X+ y Nokia XL quieren convertirse en los próximos superventas con pantallas de 4 pulgadas en los dos primeros y una de 5 en el último.
El procesador es el mismo en todos, el Spadragon de Qualcomm de doble nucleo a 1GHZ. Eso sí, la batería es de 1.500 miliamperios en los modelos pequeños y de 2.000 miliamperios en el de 5 pulgadas, siendo la RAM del X de 512 Mb y de 768 Mb en los otros. Todos tienen 4 GB de memoria interna, algo justo para los tiempos que corren.
Llevan un Android totalmente modificado que de hecho recuerda más a Windows Phone (recordemos la alianza de la finlandesa con Microsoft) y por lo tanto no hay rastro de Google por ningún lado.
Las aplicaciones de Android son compatibles con el terminal, sí, pero hay que descargarlas desde la tienda de Nokia, que ofrece además sus propios servicios, por lo que habrá que ver qué pasa con aplicaciones propias de Google como Maps.
Lo más llamativo, sin duda el precio. El Nokia X, ya disponible, cuesta 89 euros, el Nokia X+ 99 euros y el Nokia XL 109 euros.
