Aunque el CEO de Uniqlo, Tadashi Yanai, continúa obsesionado con superar algún día al fast fashion Zara, las cosas no han sido fáciles para la cadena japonesa. Según sus declaraciones del año pasado, planeaba “reconstruir” las operaciones en Estados Unidos y aunque ha tenido una serie de retrasos y cambios en su ambicioso plan de abrir 200 tiendas hasta el 2020, Uniqlo nos sorprende ahora con un nuevo canal de venta.
El minorista nipón quiere que las compras de prendas de vestir sean tan fáciles y rápidas como comprar un chocolate es por ello, que recientemente ha lanzado sus nuevas máquinas expendedoras de ropa en 10 ubicaciones en todo Estados Unidos, incluyendo centros comerciales y aeropuertos.
Estas máquinas denominadas “Uniqlo To Go” almacenarán dos de los artículos más populares de la colección “LifeWear” de la marca: una camiseta térmica ($ 14.90) y una chaqueta ligera ($69.90 dólares). Estos vendrán en diferentes tamaños y colores. Con solo apretar un botón, los clientes podrán elegir el producto en el color de su preferencia.
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Las máquinas expendedoras de casi 1.80 metros de alto, permiten a Uniqlo abrirse en diferentes mercados y crecer su presencia en el territorio estadounidense sin tener que comprometerse a invertir en tiendas. Asimismo, las máquinas permite al minorista aprovechar el tráfico peatonal en los aeropuertos.
Mientras que las máquinas expendedoras en los Estados Unidos son en su mayoría relegadas a las ventas de aperitivos y bebidas (aunque en las concesiones de aeropuertos o lugares de alto tránsito turístico se cubren necesidades típicas de viaje como auriculares, maquillaje y pasta de dientes), son ampliamente utilizados en Japón para vender una variedad de bienes de consumo.
Las nuevas máquinas podrían ayudar a empujar el nombre de Uniqlo, aumentando la visibilidad en los EE. UU., que fue señalado por el minorista el año pasado como una prioridad. Pero las máquinas tienen sus propias complicaciones para los consumidores estadounidenses, ya que no hay lugar para probarse la ropa, y si la compra de última hora no funciona, solo puede ser devuelto en una tienda física o en línea.
La venta minorista de autoservicio en los Estados Unidos continúa creciendo, ya que el auto-pago y la recogida en tienda de pedidos en línea, se observa cada vez más en las tiendas. Quizá el éxito de iniciativas como esta puedan animar a otros minoristas a apostar por estos nuevos canales de venta.
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