Planea Walmart entrar en España? No es descartable. La debilidad de las ventas del retail, la escasa diferenciación entre enseñas o la nueva normativa comercial europea son oportunidades para una compañía del tamaño del líder mundial. Oportunidad es también el terreno abonado para los discounters muy en línea con la política del líder mundial centrada en surtido, proximidad, precio y valor añadido. Cuatro valores en alza para el consumidor español.
Y de llegar ¿lo haría solo o en compañía de otros? Mejor, con tamaño. En la mente de muchos está algún retailer con grandes analogías, en servicio y precio, con el gigante estadounidense. Pero, atención, recordemos su anterior entrada en el Reino Unido o en Alemania, en ambos casos con segundos o terceros espadas. En España, grupos o filiales de mediano tamaño, buen posicionamiento en tiendas, regiones y resultados u otros con una maquillada o delicada situación financiera podrían entrar en juego.
Queda la hipótesis contraria. Walmart no vendrá, el momento pasó. La frustrada experiencia alemana o la venta de su filial logística Gazeley con almacenes en Zaragoza y Madrid avalan esta teoría. En todo caso, lo haría con su canal electrónico, acelerado con el nombramiento de Eduardo Castro-Wright como presidente y CEO de Global.com y Global Sourcing. Atención de nuevo. Apoyar el negocio digital con la tienda física es hoy la estrategia ganadora.
Una mayor expansión de Walmart en Europa supone algo más que un nuevo competidor. Por tamaño y por filosofía. Después de cuatro décadas de modelo francés, con el hipermercado vencedor, ó de modelo alemán, con su agresivo hard discount, otros formatos de hiper-super o especialistas, combinando precio bajo y servicio, podrían transfor¬mar un paisaje comercial dominado por fórmulas continentales. Valga el ejemplo de la reciente tienda en Londres del también estadounidense Best Buy, primera de una lista de otras cien que el número uno mundial del mercado de electrodomésticos prevé abrir en el viejo continente.