Según el presidente ejecutivo de Walmart de México y Centroamérica, Scot Rank, la inseguridad ha representado un cambio en las conductas de compra de los consumidores. El 11 de octubre del año pasado, mencionó que si bien las ventas no se han visto aún afectadas, los hábitos de los clientes e incluso del personal se han modificado en las ciudades con mayor incidencia de episodios violentos.
Por estos fenómenos, Walmart ha modificado el horario de empleados y ha extendido los servicios de entrega a domicilio para garantizar la seguridad de asociados y clientes.
Soriana, el mayor rival en la zona fronteriza del norte, también ha señalado que el problema de inseguridad de esa región (en la que concentra la mayor parte de su negocio) ha generado una caída en sus ventas.
El ejecutivo adelantó que aún cuando se trata de un problema grande, la inseguridad no ha afectado los planes de inversión de la compañía.