Amancio Ortega, principal accionista del emporio de moda Inditex, luego de convertirse en el hombre más rico del mundo en la lista de Forbes con una fortuna de US$79.600 millones, superando a la leyenda de la tecnología, Bill Gates con una fortuna de US$78.100 millones, conozca cómo su modelo de negocio de moda fast fashion ha logrado tener éxito rotundo en el mundo.
En un informe, elaborado por La República de Colombia, mencionó que desde el 2007, cuando Ortega extendió su negocio hacia el país cafetero (mediante el modelo de franquicia con Texmoda) las cosas les han salido muy bien, tanto que este año abrieron cinco nuevas tiendas para completar 43 puntos (en el mundo abrieron 94 tiendas).
De la cifra, 12 vitrinas son de Zara, la marca líder del portafolio de ocho referencias: Zara, Pull&Bear, Massimo Dutti, Bershka, Stradivarius, Oysho, Zara Home, y Uterqüe. Con ellas, la empresa tiene 6.683 locales en 88 mercados.
Solo Zara le representó ventas globales a la compañía por US$6.916 millones en el primer semestre de 2015. La cifra aumentó 18% en relación con el mismo periodo de 2014, cuando facturó US$5.864 millones.
Los colombianos tienen acceso a 90% de las marcas (Uterqüe es la única sin presencia en el país) y las ventas en América le representan a la firma 14,7%.
Aunque los expertos del sector aseguran que la devaluación ha aumentado los precios de sus prendas cerca de 10%, en territorio nacional su mercancía se mantiene vigente.
LEE TAMBIÉN: La guerra de las fast fashion en el mercado peruano recién comienza
ROTACIÓN SEMANAL PARTE DE SU ESTRATEGIA
De acuerdo con Sergio Soto, director ejecutivo de Fenalco Antioquia, el secreto está en que ofrecen “excelentes diseños, precios y calidad”. También a que cambian la colección y la vitrina, en promedio, cada ocho días. A Zara, por ejemplo, llega ‘sagradamente’, nuevos productos los martes y los viernes de todas las semanas. Eso no solo ocurre en territorio nacional, sino que es una tendencia mundial.
Ese ritmo en los mostradores se ha denominado, por los expertos del sector, como ‘moda rápida’, un fenómeno que hace que se comercialice ropa desechable a precios muy económicos. El fenómeno se ha acelerado tanto, que actualmente se venden más de 80.000 millones de prendas por año. O sea 400% más de las que se movían hace dos décadas. La revolución del comercio ha obligado a las tiendas de moda a multiplicar las dos temporadas del año que se veían en otras épocas, por 52 colecciones.
“Creo que haber usado la mano de obra de bajo costo le fue útil a Amancio Ortega. Sin embargo, él tiene un negocio perfecto que maneja tiempos de producción acelerados y buena rotación de inventario en tiendas”, precisó Santiago Álzate, consultor en cadenas de abastecimiento y logística.
Por otro lado, Nassif Kamlé, gerente general de Telka, dice que Zara, que trae nuevas colecciones cada semana, obligó a las empresas nacionales del sector a reinventar su negocio. Ahora quieren tener telas más especializadas en menores cantidades y son más dinámicos”.
Discussion about this post