Con un espacio de 170.000 metros cuadrados, Zara invertirá US$270 millones en su nuevo edificio de oficinas, que será la base de los equipos comerciales y de diseño.
El grupo español Inditex, dueño de la marca Zara, prevé iniciar las obras en enero de 2022, en su sede de Arteixo (La Coruña). Este nuevo edificio será base de los equipos comerciales y de diseño de Zara, y dará continuidad a la identidad visual de las oficinas contiguas, destinadas a las operaciones de zara.com.
Con una inversión de 269.59 millones de dólares (238 millones de euros), está previsto que se concluya en un plazo aproximado de dos años. Estas nuevas instalaciones, definidas por la eficiencia energética y la sostenibilidad, han sido concebidas, según el grupo, para potenciar la dinámica de trabajo horizontal entre diseñadores, patronistas y profesionales comerciales, basada en la creatividad, la colaboración abierta y la comunicación fluida.

El edificio, que tendrá cinco plantas -más dos de aparcamiento-, destacará por su estética. En el predominarán el color blanco y las grandes ventanas horizontales que favorecerán la iluminación en espacios interiores con alturas libres de 4,70 metros. Los grandes espacios diáfanos contribuirán al dinamismo de los flujos de trabajo entre departamentos.
Cada una de las plantas de los equipos comerciales, con unas dimensiones de 230 metros de largo por 104 metros de ancho, contará con dos grandes zonas de trabajo conectadas, de 9.500 metros cuadrados cada una. En la planta baja se localizarán las tiendas piloto de cada sección de Zara y áreas de patronaje; en la planta 1, Zara Hombre; en la planta 2, Zara Niño; y en las plantas 3 y 4, Zara Mujer.

Estética sostenible
Según ha explicado la firma, el proyecto diseñado por el estudio de arquitectura Batlleiroig -responsable también de la reciente ampliación de las instalaciones de Inditex en Arteixo y de varias de las sedes de sus marcas-. Se basa en un diseño ordenado y estructurado de espacios de trabajo flexibles con capacidad de adaptarse a múltiples configuraciones.
La edificación seguirá también los más elevados estándares de sostenibilidad. La digitalización en fase de diseño permitirá un proceso constructivo a base de elementos industrializados. Este hecho y un uso intensivo de materiales reciclados minimizará la huella de CO2 y la generación de residuos en obra. Cumplirá con los exigentes requisitos del US Green Building Council (USGBC), la referencia en estándares medioambientales para edificaciones sostenibles, y aspirará a su máxima certificación, LEED Platino.
