Burberry, que lleva varios meses advirtiendo sobre el impacto en su negocio del entorno económico, ha cerrado el primer semestre del año con un beneficio de 106 millones de euros. Esta cifra representa un descenso del 27% respecto a los 146,4 millones de euros que la firma de lujo ganó en los seis primeros meses de 2011.
Burberry ha atribuido el descenso en su beneficio a elementos extraordinarios derivados de la finalización del contrato de licencia con Interparfums para sus perfumes. La compañía británica internacionalizará está línea de negocio tras la ruptura con Interparfums.
El grupo ha cerrado el primer semestre con unas ventas de 1.097 millones de euros, frente a los 830 millones de libras (1.031 millones de euros) del primer semestre de 2011, tal y como adelantó la compañía hace un mes.
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