La actual modelo de Samsung, Galaxy S3 contribuyó a posicionar a la compañía en la cima de la industria de los teléfonos inteligentes, con una cuota de mercado de 30% en el 2012, y generó el paso de ser un fabricante sólido y eficiente, pero poco atractivo, a ser un líder de nuevas tendencias, un rival importante de Apple.
Actualmente, el Galaxy S4 tiene un nuevo reto: impresionar a los consumidores que ya están acostumbrados a los avances anuales con respecto a la tecnología, la cual ofrece pantallas más grandes y nítidas, procesadores más veloces y cámaras más precisas, sin contar a los dispositivos cada vez más livianos y delgados.
“Es mucho más difícil impresionar al consumidor”, destacó Carolina Milanesi, analista de dispositivos de consumo de la firma de investigación Gartner. Añadió que “Samsung se ha posicionado como la única alternativa de Apple para los teléfonos de alta gama. Eso viene acompañado de expectativas y responsabilidad”.
El Galaxy S4, será presentado el 14 de marzo en Nueva York, abriéndose paso en una era en que la industria experimenta una transición desde la euforia inicial por los cambios tecnológicos hasta una fase de sólido crecimiento. De acuerdo con las especulaciones de los observadores del sector, se anota que el Galaxy S4 ofrecerá nuevas mejoras incrementales de hardware; como por ejemplo: un chip más rápido y una cámara de mayor calidad.
Cabe añadir que la capacidad limitada de introducir grandes mejoras de hardware aumenta radicalmente la presión bajo la que se encuentra la compañía. Una de sus grandes debilidades en la competencia contra Apple es el software ya que el gigante de la manzana puede vincular su hardware a su propio sistema operativo, mientras que Samsung utiliza Android.