Coca-Cola anunció el cierre de cuatro de las 11 fábricas que tiene en España, una medida que dejará sin trabajo a 750 personas.
La multinacional presentó a los sindicatos un plan de reestructuración que además del cierre de cuatro plantas, entre ellas la de Madrid y tres de Asturias, incluye un expediente de regulación de empleo que afecta a 1.250 trabajadores.
La compañía confirmó el cierre de sus fábricas en Alicante, Colloto (Asturias), Palma de Mallorca y Fuenlabrada (Madrid).
La empresa se estructurará a través de un mapa circular, «racionalizando las plantas del norte de España y de la zona de Levante y Baleares, y capturando sinergias en la zona centro».
Por ello, además de los cuatro cierres ya citados se reforzará la producción y la plantilla en A Coruña, Bilbao, Barcelona, Málaga, Sevilla, Santa Cruz de Tenerife y Valencia.
En lo comercial perseguirá «un modelo de venta y distribución más eficiente», para lo que planteará una estructura operativa que mejore en «la gestión de equipos de frío y un nuevo modelo de reposición» para el punto de venta.
Coca-Cola Iberian Partners, que nació de la integración de las siete embotelladoras que la multinacional tenía en España, cuenta actualmente con una plantilla de 4.200 trabajadores en dicho país.