El máximo responsable ejecutivo de Bricorama S.A., Jean Claude Bourrelier, le indigna que en la tierra de la Liberté no tenga la liberta de abrir los domingos las puertas de sus locales de artículos y materiales para el hogar en París y en los alrededores.
Pese al desempleo récord en tierras francesas, el ejecutivo menciona que lso sindicatos y el gobierno socialista del presidente Francois Hollande le impiden abrir 31 de sus locales dicho día.
La decisión de un tribunal en un caso que presentó un sindicato frustró sus intentos de recurrir a empleados dispuestos a trabajar los domingos por un pago adicional. Y el gobierno ha hecho ‘oídos sordos’ a sus reclamos.
“Hace poco fui al Ministerio de Trabajo”, dijo Bourrelier, quien tiene 66 años. “No quieren cambiar la ley. El presidente es muy amable, pero este es un gobierno de empleados públicos que trabajaban para empleados públicos” y “los sindicatos son más fuertes en Francia que en otros países”. La lucha del ejecutivo habla de leyes laborales restrictivas que desalientan la creación de empleo a pesar de que Hollande busca revertir la declinación económica que ha dejado sin empleo a más de 3.2 millones de personas.
Una ley de 1906 exige que la mayor parte de los comercios minoristas, excluidos los de alimentos, desde los locales de ropa de Benetton hasta las grandes tiendas Printemps y la firma Bricorama de Bourrelier, cierren el “Día del Señor”. Si bien en 2009 se flexibilizó la legislación y se permitió que abrieran los domingos algunos comercios en regiones con abundancia de turistas y en zonas específicas de los alrededores de grandes ciudades, la ley sigue siendo restrictiva.