La cifra deberá ser abonada al grupo alimentario estadounidense Kraft Foods por incumplir el acuerdo que tenían ambas empresas para comerciar café envasado con la marca Starbucks desde 1998.
En concreto, Starbucks deberá abonar a Kraft US$2.230 millones en daños y perjuicios, además de US$527 millones concepto de gastos judiciales y de abogados.
El director financiero de Starbucks, Troy Alstead, se ha mostrado satisfecho con que haya concluido el proceso de arbitraje, pero asegura que está “fuertemente en desacuerdo” con la decisión adoptada.
Alstead considera que Kraft no cumplió con las responsabilidades adquiridas en el acuerdo firmado, afectando al resultado de su actividad, por lo que defiende que la cadena de cafeterías tenía derecho a darlo por finalizado sin pagar al grupo alimenticio.
“Aunque no estamos de acuerdo con que Kraft tenga derecho a compensación por daños y perjuicios, la cantidad establecida refleja el valor de nuestro negocio de café a domicilio y la permanente oportunidad de crecimiento global que tiene por delante Starbucks”, añade.
Asimismo, asegura que la decisión de romper su acuerdo con Kraft fue la correcta para “Starbucks, su marca y sus accionistas”, ya que los resultados de los últimos dos años y medio demuestran que su negocio es “significativamente más saludable” desde que asumió el control directo en 2011.
“Tenemos la cuota líder de mercado del café premium envasado y nuestra cartera total de café a domicilio ha crecido significativamente con el modelo de control directo”, remarca el director financiero de la cadena de cafeterías.