La estadística mundial, elaborada por el Departamento de Comercio de Estados Unidos, dice que el 85 % de la población aspira a tener un negocio propio, pero solo el 15 % concreta realmente ese propósito y, además, solo el 5 % llega a tener éxito. Entonces, es ahí donde entra a tallar el formato de la franquicia, pues es su labor natural buscar a ese 85 % que quiere emprender un negocio, para ofrecerle modelos de negocios con índices bajos de mortandad.
“De los negocio que empiezan como franquicia, por lo menos 80 % pasa el quinto año de vida. Es decir, el modelo franquiciatario tiene un índice bajo de mortandad. En cambio, el 60 % de los negocios independientes mueren en el quinto año de vida”, afirma Luis Kiser, vicepresidente de la Cámara Peruana de Franquicias (CPF) en exclusiva a Perú Retail.
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Como el modelo de negocio de franquicias se base en la experiencia o el ‘know how’ (el ‘saber cómo’) ya probado de una marca medianamente reconocida, esto hace que la curva de riesgo y la curva de aprendizaje se reduzcan cuando un empresario apuesta por un concepto ya conocido.
“No hay nada seguro o al 100 %, pero usar una franquicia reduce dramáticamente el riesgo, aunque -claro- no garantiza el éxito. Es mentira eso que dicen, que ‘comprar una franquicia es sacarse la lotería’, eso es un mito. El que compra una franquicia tiene que trabajarla también, pero sí tiene más posibilidades que el negocio sea exitoso y se prolongue a lo largo del tiempo”, añadió el especialista.
El franquiciante debe tener el compromiso de llevar de la mano al franquiciatario, formarlo como empresario, porque -en palabras del vicepresidente de la CPF- ‘la franquicia es la universidad del emprendedor’.
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DESARROLLO DE LAS FRANQUCIAS EN PERÚ
La primera etapa de las franquicias en el Perú se inició con la llegada de las grandes marcas en los años 80’, pero luego se vivió una etapa de convulsión social, con el terrorismo, y se puede hablar de una pausa de unos 10 años, tiempo en el que otros países de la región como Argentina y Brasil, crecieron en el tema de las franquicias.
En los 90’ se inicia la segunda etapa en Perú, con el regreso de las marcas extranjeras y la aparición de las primeras franquicias peruanas. En el 2005, cuando se funda la CPF se puede decir que se inicia una tercera etapa, que se caracteriza fundamentalmente porque los conceptos nacionales empiezan a crecer.