La firma argentina Havanna en el rumbo de continuar su expansión sumará nuevos locales en Argentina y Brasil e inaugurará una nueva planta.
“Estamos muy contentos por todo lo que está sucediendo con la compañía: salimos a la Bolsa de Comercio, proyectamos la apertura de 25 locales este año y otros tantos el próximo año en Argentina, y estamos a punto de poner en marcha la planta en el Parque Industrial Batán”, precisó el gerente general de Havanna, Alan Aurich a Télam.
Además, refirió que para este año proyectan alcanzar los $ 1100 millones en la facturación de Havanna, en comparación con el año pasado, cuando bordearon alrededor de los $ 840 millones, por lo que prevén estar un 25% arriba.
Al mismo tiempo, sostuvo que la inauguración de una nueva planta y la expansión territorial, en Argentina y el exterior, aparecen en el horizonte como los dos grandes objetivos del año.
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APERTURAS A LA VISTA
Sobre los planes para este año, el directivo indicó que hay 20 aperturas de locales ya firmadas en Argentina y en el exterior se abrirán otras 25 franquicias. Explicó también que de las aperturas que se realizan un tercio son propias y, el resto, franquicias.
De las nuevas aperturas en Argentina, algunas se producirán en las ciudades de Córdoba, San Juan, Rosario, Neuquén, Posadas, Capital Federal, el interior de la provincia de Buenos Aires y el conurbano bonaerense.
En el exterior, habrá nuevos locales sobre todo en Brasil, en San Pablo, Río de Janeiro, Belo Horizonte y Brasilia; y para el 2017, se abrirán tiendas en Estados Unidos.
“Havanna está desde 1947, con lo cual ha superado todos los momentos difíciles de Argentina y también vivió todos los momentos dulces. Este es un momento más de la economía, que puede estar un poco en baja en el consumo, pero la habilidad de la compañía la lleva a superar cualquier momento”, aseguró Aurich.
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SALIDA A BOLSA
A principios de junio, Havanna comenzó a cotizar en la Bolsa de Comercio de Buenos, donde emitió 4,27 millones de nuevas acciones, y por las cuales consiguió una capitalización de $ 158 millones, provenientes del sector privado.
Alan Aurich, actual CEO de la tradicional empresa productora de alfajores fundada en Mar del Plata en 1927, reconoció que la salida a la bolsa fue bastante bueno ya que les permitió transparentar la información de la empresa.
“Fue muy positivo ver lo que pensaban los analistas sobre la compañía, y el alto interés en el proceso de salida a la Bolsa que mostraron unos 30 fondos de pensión y otros de inversión”.
Al mismo tiempo subrayó que en las semanas previas a la emisión de las acciones, tuvieron visitas en Buenos Aires de fondos extranjeros, a pesar de que el tamaño de la compañía es de US$ 110 millones y cotizaba solo el 10 por ciento.
Agregó también que las empresas no viven de un año, sino de los proyectos y de la construcción de la marca.
PLANTA EN BATAN
En cuanto a la planta de Batán, Aurich explicó que está en plena activación de los procesos productivos, con la presta a punto de máquinas, y estimó que para octubre o noviembre estará funcionando al 100%.
“Actualmente operamos tres plantas. Hace dos años compramos un predio de casi seis manzanas en el parque industrial de Batán, con una nave de más de 20 mil metros cuadrados. Tenemos en marcha la obra de refacción y puesta a punto”, señaló.
El desembolso total para esta ubicación ha sido de más de $ 100 millones, entre la compra del predio y la revalorización general.
Indicó que a partir de ese momento toda la producción de Havanna se concentrará en esa planta, con lo cual otros dos edificios que la firma posee en la ciudad de Mar del Plata, saldrán a la venta, y solo conservará el tradicional establecimiento del barrio La Perla, que se convertirá en un “Museo del Alfajor”.
Aurich precisó que la lógica de la compañía en la búsqueda de proveedores, primero están los de Mar del Plata, y luego los de Argentina, y si no se consigue, saldrán a buscar afuera.
Actualmente, la empresa cuenta con 600 trabajadores que producen 100 millones de alfajores al año, que significan unas 6.000 toneladas medido en peso, pero las nuevas líneas de producción tienen capacidad para triplicar ésos números actuales, con el consecuente incremento en la plantilla laboral.