El gasto de consumo de las familias peruanas se redujo en un 22,1% durante el segundo trimestre del 2020, como resultado de la disminución del ingreso total real de los trabajadores dependientes e independientes, según el último reporte del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
El consumo de las familias registró menores gastos en alimentos (-3,1%), otros bienes no duraderos (-17,6%), bienes duraderos (-45,1%) y servicios (-28,5%). Por su parte, la ocupación disminuyó en un 39,6%.
En líneas generales, la demanda interna se contrajo en un 27,7% explicado por la reducción de sus componentes: gasto de consumo de las familias (-22,1%), gasto de consumo del gobierno (-3,2%) e inversión bruta fija (-57,7%). De otro lado, las exportaciones e importaciones disminuyeron en -40,3% y -31,3%, respectivamente.
A precios corrientes, el gasto de consumo final privado en el segundo trimestre alcanzó la suma de 100 mil 056 millones de soles, lo cual representa el 72,9% del Producto Bruto Interno, influenciada por los cambios en la producción y el consumo a consecuencia de la pandemia de la COVID-19.
Cabe precisar que en el segundo trimestre del año, el Producto Bruto Interno (PBI) se redujo en 30,2% como consecuencia de las medidas adoptadas por el gobierno, destinadas a afrontar la COVID-19 que implicaron el aislamiento social obligatorio, el cierre temporal de fronteras y la restricción a las actividades económicas, con excepción de las esenciales relacionadas con la alimentación, medicamentos y servicios básicos, generando la disminución del empleo y los ingresos de la economía, afectando la demanda interna y externa, de acuerdo al informe técnico Comportamiento de la Economía Peruana en el II Trimestre del 2020.