Pese a ser un mercado maduro con una penetración total en el país, la categoría de fideos, mantiene tasas de crecimiento y de consumo altas. En los últimos años ha crecido a un ritmo entre 4% y 5% anual y el consumo per cápita ascendió a 10,3 kilos, uno de los más altos en la región.
Según las empresas vinculadas al sector, todo esto se debe al mayor poder adquisitivo de los peruanos y a la mayor llegada del producto a autoservicios. Sin embargo, hay otro factor que también ha impulsado las ventas y el consumo durante los bimestres tercero (mayo-junio) y cuarto (julio-agosto) de los años 2010 y 2011: las promociones en autoservicios (como las llamadas “3×2: lleva tres y paga dos”).
No es coincidencia que las empresas lancen sus promociones durante estos meses. César Buelot, ejecutivo senior de Kantar World Panel, reveló que el lanzamiento de promociones en estos períodos del año responde a las celebraciones por el Día de la Madre y por Fiestas Patrias.
“Durante las festividades, el consumo de comida siempre se incrementa. Además, las personas suelen tener más dinero para gastar por la gratificación en esta época del año”, explicó.
A la estrategia de promociones, que duran cerca de un mes, suelen recurrir marcas medianas y pequeñas que buscan, sobre todo, hacerse conocidas en los autoservicios.
Carolina Bravo, ejecutiva junior de Kantar, explicó que las promociones 3×2 buscan llamar la atención de las amas de casa. “A ellas les interesa más una promoción que un descuento en el precio del producto. Como compran mayor cantidad, van menos al punto de venta. Eso hace que la frecuencia de compra sea menor, pero no la del consumo”, detalló.
Además, explicó que si bien una marca no logra alcanzar al líder del mercado a través de promociones, sí consigue restarles participación a otras marcas pequeñas, lo que finalmente genera un mayor consumo.
Para Alicorp, que compite en el segmento con sus marcas Don Vittorio, Nicolini, Lavaggi, Alianza y Espiga de Oro, el mayor consumo por fideos envasados demuestra que los consumidores están dispuestos a pagar más por productos que ofrecen mayores beneficios y que están respaldados por marcas reconocidas.
Cabe mencionar que las mayores ventas y consumo de fideos no han beneficiado solo a Lima, pese a que esta representa el 56% del mercado. El menor poder adquisitivo de los consumidores fuera de la capital genera que las marcas económicas impacten más ahí, aunque algunas premium están muy bien posicionadas.