Zara, la firma más importante del gigante textil español Inditex, apertura a partir de mañana su tienda virtual de internet para el mercado chino, con lo que ingresa a una tendencia comercial que tiene cada vez más peso en el país asiático, la de las compras en línea.
A finales de abril pasado Inditex tenía ya 289 tiendas en más de 40 ciudades en China, que aumentarán hasta cerca de 440 a final de año, pero la marca española parece haber comprendido la importancia de vender también por internet si desea estar presente de verdad en el mercado chino, su principal mercado fuera de Europa.
“Desde luego Zara no es ninguna pionera en este frente”, explicó a Efe Chen Zhan, directora de Investigaciones de Consumo de la firma de estudios de mercado TNS en Shanghái, que recuerda que cerca del 40 por ciento de los más de 500 millones de usuarios de internet en China tiene experiencia comprando en la red.
“Incluso antes de que el portal de moda VANCL triunfase vendiendo ropa suelta por internet, la moda ya era la categoría más demandada en el mercado entre usuario y usuario (el llamado C2C) de Taobao”, el “eBay chino”, que aún hoy acapara entre el 60 y el 70 por ciento del comercio en línea de todo el país, añadió.
Según TNS, las ventas por internet suponen cerca del 5 por ciento de las ventas minoristas totales en China, y según otra consultora que hace estudios de mercado, DDM Asia, en 2011 el sector de la moda vendió ropa por internet por valor de 33.000 millones de dólares en todo el país (26.181 millones de euros).
En su estudio elaborado entre enero y febrero pasados con 2.020 entrevistas telefónicas aleatorias en Shanghái, Pekín, Cantón, Chengdu y Wuhan, el 15 por ciento de los encuestados había comprado ropa por internet en el último mes.
Según sus cálculos, eso equivale a unos 6,9 millones de compradores mensuales sólo en esas cinco grandes ciudades, aproximadamente la población de Londres.
Internet está cambiando el mercado en China y “los vendedores tradicionales tienen que repensar su modelo de negocio y transformarse para responder a las cambiantes necesidades de los consumidores en la era de las compras en línea”, asegura Chen.
“Para muchas firmas, vender en línea ya se ha convertido en una obligación, no sólo en una opción”, asegura.
Para las grandes marcas en China “ya no vale sólo (cuidar) la imagen física, también pesan los ‘blogs’, las páginas de tendencias, las recomendaciones de usuarios”, por lo que el peso de internet es cada vez mayor”, señaló a Efe el consejero jefe de la Oficina Económica y Comercial de España en Shanghái, Carlos Pascual Pons.