Makro está preparando un proyecto para competir con plataformas delivery como Glovo, Uber Eats o Deliveroo en el mercado de España.
La filial española del grupo alemán Metro, dedicada a la distribución del sector de la restauración, ha iniciado las primeras pruebas en bares y restaurantes de España con su propia herramienta de entrega a domicilio con el objetivo de ayudar a la hostelería en estos momentos tan complicados por la crisis sanitaria.
MAKRO BUSCA FIDELIZAR A SUS CLIENTES
Este sistema propio de gestión de pedidos de comida tanto para recoger como a domicilio para la hostelería elimina las comisiones, a cambio de pagar una suscripción mensual.
El precio mínimo de activación es de 199 euros, sin iva, y una cuota mensual de 49 euros mensuales sin iva, independientemente del número de pedidos que reciba el restaurante o bar.
Makro ha iniciado las pruebas, con una decena de bares y restaurantes de España (Madrid y Barcelona), de su propia herramienta de reparto a domicilio y take away que desarrolla de la mano de Google y que en Francia ya trabaja con 2.500 locales.
“El delivery es algo que hay que democratizar. Los volúmenes se han duplicado este último año y harán lo mismo en 2021. Es algo que se va a quedar y va a ganar relevancia, pero no puede sustituir por completo la experiencia en restaurantes, sobre todo en un país como España”, sostuvo Gries.
Además, destacó que este tipo de servicios hace a Makro más relevante para el hotelero, que sabe de esta forma que son sus socios integrales y les ayudan a ganar más dinero.
UN AÑO DURO
Cabe destacar que la compañía depende más del 70% de la hostelería, uno de los sectores más perjudicados por la pandemia.
“El 2020 ha sido un año brutal. Hemos cerrado el año fiscal en septiembre con una caída de la ventas del 17% y para 2021 la previsión es que no alcancemos las cifras de 2019, pero sí que sea mejor que la de 2020”, explicó el consejero delegado de Makro en España, Peter Gries, en declaraciones recogidas por Europa Press.